Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

II Reyes 6, 17-25

17 Oró Eliseo y dijo: «Yahveh, abre sus ojos para que vea.» Abrió
Yahveh los ojos del criado y vio que la montaña estaba llena de caballos y

carros de fuego en torno a Eliseo.

18 Bajaron hacia él los arameos y entonces Eliseo suplicó a Yahveh
diciendo: «Deslumbra a esas gentes.» Y las deslumbró según la palabra de
Eliseo.

19 Eliseo les dijo: «No es éste el camino y no es ésta la ciudad. Venid
detrás de mí y os llevaré donde el hombre que buscáis.» Y los
llevó a
Samaría.


20 Cuando entraron en Samaría, Eliseo dijo: «Yahveh, abre sus ojos
para que vean.» Abrió Yahveh sus ojos y vieron que estaban dentro
de
Samaría.

21 Cuando el rey de Israel los vio dijo a Eliseo: «¿Los mato, padre
mío?»

22 El respondió: «No los mates. ¿Acaso a los que haces cautivos con
tu espada y con tu arco los matas? Pon ante ellos pan y agua para
que
coman y beban y se vuelvan a su señor.»

23 Les sirvió un gran banquete, comieron, bebieron y los despidió, y
se fueron a su señor, y las bandas de Aram no volvieron a entrar en la tierra
de Israel.

24 Sucedió después de esto que Ben Hadad, rey de Aram, reunió todas
sus tropas y subió y puso sitio a Samaría.

25 Hubo gran hambre en Samaría; y tanto la apretaron que una cabeza
de asno valía ochenta siclos de plata, y un par de cebollas silvestres cinco
siclos de plata.